Atrevete a soñar desde 12 euros al mes

¡¡¡¡Jajajajaja!!!!

¡Pero si yo sueño gratuitamente! Y además no me gusta.

No, no me gusta soñar. Es algo que me resulta agotador, tener que vivir otra vida distinta a la que vivo despierto… ufff… ¡qué cansado!

Por otro lado, lo que realmente quieren decir es que te atrevas a dormir… pero bueno, les parecerá más poético hablar de sueños que de adormideras.

Y si se refiere a esta idea de tener sueños como aquellos que llamaríamos aspiraciones más o menos ilusorias, el problema que tengo es que nunca me creo que sean ilusorias, así que acabo por ir a por ellas sin pensar si son sueños o fantasías: yo los llamo proyectos.

Es tan divertido a veces el correo publicitario que me llega al buzón de entrada que jamás activaré un filtro de spam para no perdérmelo.

Descansa como necesitas con la gama de colchones de LoMonaco. El descanso que necesitas con tu colchón Lo Mónaco desde 12 € al mes. Lo Monaco es una empresa de venta directa a distancia de productos y accesorios cama. Siempre preocupada con el confort de sus clientes y la calidad de sus productos, Lo Monaco tiene una línea de productos para decoración y descanso como colchones. Elija el colchón Lo Monaco que mejor se adapte a sus necesidades Disponemos de una amplia gama de colchones para ofrecerte un colchón adaptado a tus necesidades. Compra tu colchón con Lo Monaco y consigue el descanso perfecto.

Descansa como necesitas con la gama de colchones de LoMonaco. Con 10 años de garantía.

Además, plagadito de faltas de ortografía (Monaco sin tilde, ni más ni menos, en su propio nombre) y se quedan tan panchos. Total, no creo que piensen que alguien, realmente, los lee.

Coprocromatismo

caca-purpurina

Sí, coprocromatismo es lo que suena: colores de mierda.

Es que he encontrado estas divertidas pastillas (bueno, tan solo el anuncio de las mismas) y justo el otro día me divertí leyendo sobre las diferentes tendencias que en un artículo de Wikipedia enumeraban de colocaciones de papel higiénico, y no he podido por menos que sentirme tentado y dejarme llevar hasta acuñar ese término, de raíces griegas, clásicas, sí, ¡toma clasicismo!

Aunque cuando se habla de raíces clásicas griegas no se suele especificar si jónicas, dóricas, áticas, tebanas… y supongo que se acaban refiriendo en la mayoría de los casos a esa koiné tan conocida (por otros que no soy yo).

Barba Hipster o el nuevo Talibán

barba-hipster

No sé si empezar a mentalizarme de que en mi barrio se impone (SE IMPONE) llevar esta barba antihigiénica y vintage… o sea, que más me vale dejarme crecer las barbas y ponerlas a remojar.

Pero es que no sé si está entre una moda o una imposición talibán habida cuenta del numerosísimo personal que la lleva a toda honra. Tampoco me acabo de decidir por elegir un lugar de mi preciada piel para taladrar innecesariamente. Tengo más que de sobra con la cantidad de orificios habituales, algunos de los cuales fueron ya traspasados más de lo deseado.

Yo no acabo de verme guapo con ese nuevo aspecto… pero quizá es cuestión de costumbre o de convencimiento ideológico o religioso.

Quizá tengo demasiado presentes los planteamientos de Federico en torno a mi propia divinidad… como para ser fan de Divinity…

Entrada ligera para comenzar el nuevo curso.

consulta.c

/*****************************************
consulta.c

Programa para La Consulta

Me han propuesto lo siguiente:

Necesitaríamos cada día una serie de SIETE números del uno al seis -se pueden repetir cifras –Ej: 2451223–. Sin pensártelo demasiado, los primeros que te vengan a la cabeza.

Pero esto me parece tremendamente difícil de lograr
pues escribir siete números sin pensarlo (demasiado) me resulta imposible,
así que he escrito el siguiente programa para obtener 7 dígitos
del 1 al 6 sin pensarlo en absoluto… aunque no es lo mismo, lo sé.
*****************************************/


#include

#define NUM_DIGITOS 7
#define CIFRA_MAX 6
#define CIFRA_MIN 1

main()
{
int cifra;
char numero[NUM_DIGITOS] = "1234567";

srand (time(NULL));

for (cifra = 0; cifra < NUM_DIGITOS; cifra++) { numero[cifra] = rand() % (CIFRA_MAX-CIFRA_MIN+1) + (CIFRA_MIN); // Convierto cada dígito a caracter para tratarlo como una cadena numero[cifra] = '0' + numero[cifra]; }; printf("%s\n", numero); }

Aún en papelitos

DSC_1457

No me puedo creer que aún hoy siga llegándonos esta antigualla de Guía de Páginas Amarillas, en la era de Internet por antonomasia y después de haber comunicado por activa y por pasiva innumerables veces a las empresas encargadas del reparto de las Páginas Amarillas que no deseaba seguir recibiendo su innecesario derroche de papel.

Y las páginas blancas están incluidas, aunque creo recordar que eran de particulares… o sea, que no deberían estar ahí, aunque solo fuese por defecto de aplicación de la inasumible LOPD.

Ya en una noticia del 2011 en L.A. Times, nos informaban que en San Francisco se había votado por 10 a 1 que se dejase de suministrar ese mamotreto celulósico por motivos de impacto medioambiental. Pero casi habría que decir que también por sentido común… si es que eso existe.

Pero aquí como si nada, oiga, seguimos teniendo y reteniendo servicios «del pleistoceno», será para no perder otro empleo, será… ¡Ay!

Guerra Civil Española

Frente Norte

No es un ejercicio de recuperación de la memoria histórica, pero en parte sí. Jugar a la Guerra Civil Española es recordarla, es afrontar que existió un enfrentamiento que podríamos llamar golpista.

Es un juego de mesa, antiguo, creado por la empresa NAC, de estrategia, derivado, como todos ellos, del Ajedrez, en el que están representadas con detalle la mayoría de las unidades de combate que participaron en aquel abyecto episodio de nuestra historia.

Por supuesto, las fuerzas «grises» de los «nacionales» (esta denominación es odiosa pues simplemente deberían haberse llamado insurrectos, golpistas o algo «peor») son los que comienzan el juego y suelen ser quienes ganan. Se le enfrentan los Republicano de verde (no sé si por el verde esperanza).

En esta ocasión, yo lideré las fuerzas republicanas, aunque suelo jugar con las fuerzas franquistas porque nadie las quiere o porque comienzan perdiendo; hay que tener paciencia ya que en 1937 entran en liza los refuerzos italo-alemanes y una invencible aviación que arrasará cualquier combate (y eso que no se representan los civiles muertos).

En esta partida, tuve el acierto de defender con éxito Huesca y Vitoria, expulsando a las fuerzas enemigas del norte del Ebro y cerrando así un frente que resulta extenuante para la recepción de refuerzos. Cataluña y Euskadi estuvieron tranquilas hasta el final de la contienda. También gané la batalla de Belchite, pero luchándola en el 36, haciendo caer Zaragoza y Teruel. Este cambio de acontecimientos con respecto a lo que fue la Ofensiva de Zaragoza fue crucial pues desplazaba los aeropuertos disponibles en territorio controlado por los golpistas hasta más allá de Soria, dejando a sus tropas indefensas ante la mucho menor presencia aérea republicana.

Para esto, tuve que sacrificar la defensa de Andalucía, salvo las regiones montañosas de Sierra Nevada, pero estaban lejos del centro del tablero, lo que hacía que él tuviese que dispersarse, teniendo más frentes abiertos mientras mis tropas republicanas resistían hasta poder comenzar un tímido contraataque en 1938.

Se perdió Asturias, pero se mantuvo Santander, socorrido por una flota de Acorazados. Madrid estuvo reñido hasta el final de la contienda, pues la sierra, como ocurrió en la realidad, ejerció un fuerte efecto tampón que no permitía a ninguno de los dos avanzar contra el otro.

Comenzando el juego

Cuando llegó la hora de recibir refuerzos, sus aviones no pudieron organizar un frente unificado, así que tuvieron que enfrentarse de manera aislada a las fuerzas aéreas republicanas… que vencieron y, con ello, desequilibraron la batalla. A partir de este momento, solo quedaba ir, poco a poco, cediendo terreno. La guerra estaba perdida para las tropas de Franco y sus aliados nazi-fascistas.

Una tremenda batalla naval en el Estrecho de Gibraltar llegó tarde a evitar que las tropas africanas (la legión, los regulares, etc) acabasen su desembarco en tierras gaditanas y tampoco consiguieron atravesarlo. Los destructores se bombardeaban sin avances significativos en las posiciones.


GSP Atacando

David en marcha

Este juego siempre me recordará a las infinitas noches que mi amigo Xabi y yo nos retábamos para reconstruir el pasado de aquella infamia, él siempre con los republicanos, pero casi siempre se repetía el patrón: España parecía estar condenada a vivir una dictadura de 40 años.

¿Qué habría pasado en caso contrario? Con un par de victorias estratégicas importantes, el curso de la historia de este país podría haber sido muy diferente.

¿Desunión? ¿Falta de buenos estrategas? ¿Falta de recursos, de ayuda exterior? ¿Falta de motivación?

No sé, pero ahora es tiempo de mirar hacia adelante y decidir cómo queremos que sea este país, aunque sigamos jugando al pasado durante una jornada de visita familiar. Me alegra saber que a mi sobrino, en algún lugar de su mente, le gustó que ganase yo, por el hecho de ver vencedores a los vencidos, a los legítimos representantes de la voluntad popular.

Obsolescencia Programada

Si existiera un dios (creador) habría que denunciarle por prácticas de Obsolescencia Programada en el diseño de los seres vivos, especialmente de los humanos, que son los que más nos atañen.

No es descabellado pensar un organismo que sea capaz de auto-regenerarse auto-abastecerse, auto-gestionarse. Me recuerda tanto a mi película favorita: Blade Runner. Queremos saber cuánto vamos a durar, almacenamos recuerdos enlatados para suponer que así dejaremos algo tras nosotros, tras nuestra desaparición.

Pero además está el hecho del deterioro progresivo, las goteras para las que ningún seguro tiene cobertura completa. Vamos extinguiéndonos como gotas de agua bajo la lluvia, sin remedio, tan solo paliativos que postpongan lo inevitable, que por otro lado es curiosamente lo que da sentido a las acciones de nuestra vida finita, in-eterna, que es tan sagrada como para no desperdiciar ni un segundo de ella.

Hay bombillas funcionando desde hace más de 100 años. Hay aparatos que, si se dejasen a su buen uso, sin esfuerzo, durarían un milenio, carros, ruedas… pero nosotros, los penosos seres humanos, tan solo estamos pensados para unas cuantas décadas de funcionamiento y, en el mejor de los casos, un par de ellas a pleno rendimiento.

¿Por qué la semana tiene 7 días?

semana en hebreo

Siempre me ha intrigado esta cifra, siempre pensé que era un número muy raro, ese siete, ese número primo, que no está relacionado con los dedos de las manos, ni con los números de extremidades…

Hasta que me percaté que es un divisor de 28, es decir, se dividía en el antiguo Creciente Fértil el mes siempre lunar en 4 partes iguales, cada una de ellas de 7 días. De ahí también la importancia que tiene (y que tampoco acabé nunca de entender) el cambio de fase lunar, pues se divide en 4 fases y no simplemente en 2, que para mí era lo esperable (creciente o decreciente).

Y hoy, viendo esta imagen de los días de la semana escritos en hebreo, me ha dado por pensar que quizá hay una razón adicional para no escribir de 1 a 7 los días, sino que en realidad son 6 numerados y un séptimo que quedaba reservado a dios o lo que sea, pero que también es el que está fuera de las cuentas, y el 6 me hace recordar el sistema de numeración sexagesimal tan extendido también por aquellas latitudes en aquella época.

Es decir, la semana no es de 7 días, sino de 6+1, lo que es mucho más sencillo de comprender.

6 como en 60 minutos de una hora, como en 24 horas de un día, en una docena de huevos… a contar con los dedos… de una manera muy peculiar:

Al igual que en el caso del sistema decimal, el origen se remonta a una manera de enumerar usando los dedos de las manos. En la Antigüedad los habitantes del llamado Creciente Fértil contaban señalando con el dedo pulgar de la mano derecha, si se era diestro, cada una de las 3 falanges de los restantes dedos de la misma mano, comenzando por el meñique.

Con este método se puede contar hasta 12. Y para seguir con cifras mayores, cada vez que realizaban esta operación se levanta un dedo de la mano libre —la izquierda— hasta completar 60 unidades (12 x 5 = 60), por lo que este número fue considerado una «cifra redonda», convirtiéndose en una referencia habitual en transacciones y medidas.

Similar suerte corrió el número contado en la mano derecha, el 12, y algunos múltiplos como 24, 180 (12 x 15, o bien 60 x 3) y 360 (12 x 30, o bien 60 x 6). Por esto, el sistema sexagesimal se emparenta en su raíces históricas con el sistema duodecimal.

Esto no es una broma