El estudio

Me fui lejos.
No te vi, pero supe que tu olor
me llegó.
Tus besos no pudieron
conseguir mi olvido.

Te recordé sin fin:
tu cuello, tus ojos,
tu piel, tu sexo,
tus muslos, tus tobillos,
tus pies.

Me fui lejos y tú
viniste conmigo
porque tu cuerpo
fue, como siempre,
mi estudio
preferido.

Esto no es una broma