Terminada la rama de lenguas Urálicas

evolución de las lenguas urálicas

Dentro del Proyecto de Organización Filogenética de Lenguas del Mundo, ayer terminé de clasificar las lenguas urálicas y queda pendiente para terminar la «familia», el apéndice de lenguas yukagiras que forman la familia uralo-yukagira.

Siempre pensé que se trataba de una rama de las uraloaltaicas, pero parece ser que no, que esa agrupación tenía una intención casi racial, étnica, más que lingüística.

Las lenguas urálicas me han tenido entretenido por un largo periodo de tiempo. Más de lo que esperaba, pero es que las saami decidí tomármelas en serio y resultaron ser un latazo. Además, la escasa información de muchas lenguas samoyedas también han contribuido a cierto retraso que no afecta mucho a nadie más que a mí.

Ahora toca pensar qué camino continúo. ¿Quizá retome las indoiranias de las indoeuropeas? ¿Hago la nofamilia paleosiberiana? hummmm…. ¡vaya horizonte!

De acuerdo y no

esposa-cocinarQué curioso, estoy de acuerdo al 100% y, sin embargo, no estoy de acuerdo.

Sigue pareciéndome, sutilmente si se quiere, sexista el contenido.

Me pregunto qué pasaría si sustituyo esposa por esposo y sirvienta por sirviente y algo me dice que no suena igual.

Cuando lo leí (hombre que soy) creía que era a mí a quien me preguntaban lo de quieres casarte conmigo… e inmediatamente, tras leer la respuesta, me dije: yo sí que sé lavar, planchar y cocinar (aunque me niegue a planchar, por motivos socioeconómicos ;-)), pero cuando leí la última réplica, me di cuenta de que lo había comprendido al revés.

Se me había pasado el hecho de que quién hace la pregunta es, de habitual, el hombre. ¿Cómo y por qué se me había pasado este detalle?

Y añadí una cosita más, me parecería necesario que si se tratase de un hombre se exigiese que, antes de proponer matrimonio, supiese lavar, planchar, cocinar (incluso coser y cantar). En resumidas cuentas, que fuese un ser independiente y capaz de resolverse sus necesidades domésticas.

Pero aún hay más, ¿por qué limitarlo a las exigencias para un hombre? También para una mujer. Para cualquier persona, independientemente del género, raza, religión, etc.

Y esto entraba un poco a cuestionar lo que venía a decir el mensajito de red social típico/tópico. Así que, por supuesto, no compartí.

Me parece que pierdo demasiado tiempo pensando en naderías en torno a naderías.

Tormento escalado

Título extraído de un verso de un poema de Eva Obregón Blasco

 

Tormento escalado

es cuando tus labios caminan demasiado despacio por mi piel
es despertar al alba sin necesidad y con sueño
es el agua de la ducha quedándose cada vez más fría
es tu padre gritando cada vez más alto
es una avellana que cayó por la ladera de una montaña nevada y no consiguió arrastrar nieve consigo
es la película inconclusa cuyo título no recuerdo.

Tormento escalado

es acariciarte sin que dejes de pensar en el último mensaje recibido por whatsapp
es un grito en la niebla
es la noche
es esa noche
es un olvido provocado por el goteo del alzheimer
es el principio de un todo sin música
y sin poesía.

Andalucía sin la Ley D’Hont

andalucía sin Dhont

Ya, ya, si dicen que la Ley D’Hont es la bestia parda y algo de cierto hay, pero también es cierto que se vota lo que se vota (suponiendo que no haya tamayazos, claro).

Las elecciones andaluzas han sido así y se pueden ver los resultados con detalle, pero los votantes debemos saber (es nuestra responsabilidad) que votar en un sistema electoral como el que tenemos beneficia a los partidos más votados. Está claro que la muerte del bipartidismo no será tan fácil, pues el sistema actual lo fomenta, pero quedará la responsabilidad última en las manos, también, de unos votantes que no acabamos de darnos cuenta de que necesitamos tomar medidas.

Alguien en una red social comenta:

Como dice mi hermano (y no creo que le falte razón), ha ganado lo que ha querido la tele, porque la maldita caja tonta solo se ha centrado en mostrar a los partidos que ha querido, escondiendo a los otros (algo que ha rozado la ilegalidad o que inluso ha podido ser ilegal). Y, como la gente es gilipollas y sin personalidad, han repetido lo que la tele les ha dicho, y así es como han salido los mismos partidos de mierda de siempre.

Y yo sigo viendo lo mismo: desprestigiamos a «la gente» como si no lo fuésemos, y claro, luego nos da por pensar que «esa gente» ha votado mal… pero esto no es un pensamiento muy «democrático», pues suponer que «la gente es gilipollas y sin personalidad» es el primer paso para justificar una dictadura o cualquier tipo de gobierno de unos pocos (cualificados por vaya usted a saber qué razón).

Por cierto, a pesar de la ley malévola (dicen que injusta pero no lo tengo tan claro, simplemente no beneficia a quienes obtienen menos votos, pero bien podrían ser el PP, o el PSOE, como me encantaría que sucediera de una maldita vez) el parlamento andaluz estaría en manos del PSOE y el PP fundamentalmente. El mismo tipo de acuerdos se tendrían que hacer… no cambiaría mucho, más allá de cierta repercusión en la financiación muy importante de cara al futuro.

Con L’Hont:

Parlamento_de_Andalucía_(2015).svg

Ayer descubrí WhatsApp Web

Es una forma interesantísima de utilizar WhatsApp.

La app de mensajería por excelencia de la era smartphone, ha desarrollado un avance singular que siempre eché en falta: una aplicación web que permite acceder a la app de manera que se puedan enviar mensajes desde cualquier ordenador, o cualquier dispositivo, que tenga un teclado y un navegador.

Esto la convierte en la herramienta idónea para seguir comunicándose con quienes están en esta modernez de smartphonelandia y tienen una conexión a Internet (se puede no tener ¿!!?) desde casa mientras se trabaja, por ejemplo.

Es posible que el problema sea esta misma onmipresente disponibilidad de la app, que puede conllevar una agobiante sobrecarga de mensajes innecesarios en momentos en los que se requiera concentración o «enfoque».

Esto, de nuevo, me lleva a cierta necesidad que cada día veo más acuaciante de diferenciar el uso profesional que se hace de la telefonía y las redes en general de telecomunicaciones y el uso personal que se hace de las mismas.

Es decir, quiero poder recibir un mensaje de whatsapp de un alumno mientras estoy trabajando, pues sé que lo que quiere decirme puede ser «urgente» o requerir mi intervención, o informarme de algo que puedo querer saber con prontitud, pero, por el contrario, durante esa parte de mi tiempo, puedo querer estar desconectado (salvo emergencias) de mensajes de amigas o familia.

También (durante las vacaciones o fiestas de guardar y en otras franjas horarias) puede darse justo la situación contraria: no estar para el trabajo y sí para los amigos íntimos o la familia.

Surge más de un problema cuando ambos círculos se mezclan, como suele ser habitual, pero al menos es minimizar el problema a algún tipo de intersección y no a una maximalista unión de conjuntos que acaba por englobar al mundo mundial.

De momento, mientras no sea demasiado molesto, estoy contento de haber descubierto la posibilidad de usar WhatsApp vía Web y haberla estrenado con unos mensajes a mi querida Aída B.

Lobotomía

de lobo y tomía
de lobar y átomo
de tomo y lomo
de troche y moche
de loco y bobo
mío
o mía
o tuyo
o tuya
o tuyia
o nuestrio
o vuestria
o susyo de ellos y ellas
lobos lobas
tómicos
con el pan de centenos de la nueva hornada
que hacen en la tahona de aquella esquina
donde nos conocimos bajo la luna
antes de que lloviesen piedras
antes de esos diluvios de verdades
que nos enamoraron
hasta hoy

Eclipse

Elipse kepleriano
que meneas astros
barriendo ángulos
iguales con mismo
tiempo medido con
relojes o péndulo
suspendido en las
alturas desde las
que un águila sin
plumas oculta con
su envergadura de
aleteo depredador
cayendo sobre una
presa fácil donde
clavar sus garras
afiladas y suaves

Elipse de Keppler
que oculta el sol
con un astro gris
que se antepone a
la luz proyectada
contra la ventana
de mi casa con el
barro caído estas
horas pasadas con
la noche sin duda
ya apagada y esta
luna caprichosa e
inquieta que luce
una aureola sobre
sus bordes suaves

Luna águila vista
sombra infinita y
eterna casco ante
sol impotente con
faz triste muerta
como cadáver loco
como cráneo calvo
como duda sin fin
metódica pregunta
cartesiana y bajo
ilustración aúrea
que despertó niño
al mundo abriendo
su alma al diablo
su poesía al dios
y su vida enferma
al amor a su amor

Himpar

Ayer, leyendo el diccionario, he encontrado esta palabra y estoy asombrado de que exista. Me hace tanta gracia saber que hay palabras inverosímiles en esa compilación de más de 2200 páginas…


FORMAS NO PERSONALES

Infinitivo

himpar

Participio

himpado

Gerundio

himpando

INDICATIVO
SUBJUNTIVO

Presente

himpo
himpas / himpás
himpa
himpamos
himpáis / himpan
himpan

Futuro simple o Futuro

himparé
himparás
himpará
himparemos
himparéis / himparán
himparán

Presente

himpe
himpes
himpe
himpemos
himpéis / himpen
himpen

Pretérito imperfecto o Copretérito

himpaba
himpabas
himpaba
himpábamos
himpabais / himpaban
himpaban

Condicional simple o Pospretérito

himparía
himparías
himparía
himparíamos
himparíais / himparían
himparían

Pretérito imperfecto o Pretérito

himpara o himpase
himparas o himpases
himpara o himpase
himpáramos o himpásemos
himparais o himpaseis / himparan o himpasen
himparan o himpasen

Pretérito perfecto simple o Pretérito

himpé
himpaste
himpó
himpamos
himpasteis / himparon
himparon

Futuro simple o Futuro

himpare
himpares
himpare
himpáremos
himpareis / himparen
himparen

IMPERATIVO
himpa (tú) / himpá (vos)
himpad (vosotros) / himpen (ustedes)
Esto no es una broma